CIUDAD DE MÉXICO .- Permanecen estancados los tres casos por los cuales la Fiscalía General de la República (FGR) obtuvo órdenes de aprehensión contra el extitular de la Secretaría de Seguridad Pública Genaro García Luna.
El 29 de enero último la FGR precisó que los expedientes que México tiene contra el funcionario del sexenio de Felipe Calderón no se ven afectados por el juicio en su contra en Estados Unidos, y presumió la existencia de dos órdenes de aprehensión concedidas y una más solicitada y en trámite.
Las dos órdenes informadas por la FGR se refieren al caso Rápido y Furioso y al de la construcción de ocho Centros Federales de Readaptación Social (Ceferesos); la tercera que afirmó está solicitada y en trámite se trata de una acusación por enriquecimiento ilícito; y aunque el mandamiento ya fue concedido, el Ministerio Público federal no puede ejecutarlo ni incluirlo en la petición de extradición del exfuncionario federal.
El operativo fallido
En enero de 2022 el juez noveno de Distrito con sede en Agua Prieta, Sonora, emitió órdenes de aprehensión contra Genaro García Luna, Luis Cárdenas Palomino, extitular de la División de Seguridad Regional de la extinta Policía Federal; Joaquín El Chapo Guzmán, líder del Cártel de Sinaloa, y otras personas por su implicación en el operativo Rápido y Furioso.
La FGR busca imputar a García Luna por supuestamente permitir la entrada ilegal de armas estadunidenses a territorio mexicano en el contexto de este operativo orquestado por Washington.
Rápido y Furioso surgió durante una reunión realizada el 26 de octubre de 2009 entre los entonces directores del Departamento de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF) Kenneth Melson; el de la Oficina Federal de Investigaciones, Robert Mueller; y el administrador de la DEA, Michele Leonhart, en la cual acordaron iniciar una estrategia “secreta” contra el tráfico de armas entre Estados Unidos y México.
con información de (Proceso)