Finalmente, “El Hombre Hormiga” está aquí. Tras haber reunido a los Vengadores y viajado al espacio con los Guardianes de la Galaxia, Marvel Studios se dedica a un asunto mucho más pequeño. Pero llevar al diminuto superhéroe a la gran pantalla resultó más difícil que reiniciar a Iron Man, reclutar al Capitán América o dominar a Thor.
La historia de la trama para la película “Ant-Man: El Hombre Hormiga” se remonta a hace ocho años. Luego de haber escrito varios borradores del guion, la compañía declaró en mayo de 2014 -antes del inicio previsto del rodaje- que el director Edgar Wright y el guionista Joe Cornish, encargados del proyecto, se habían separado “debido a diferencias en su visión”.
Poco más de un año después, “Ant-Man” llega a las salas de cine el próximo viernes para mostrar cómo el bondadoso ladrón Scott Lang (Paul Rudd) heredó el entusiasmo por la alta tecnología del científico Hank Pym (Michael Douglas). El par se une a la severa hija de Pym, Hope Van Dyne (Evangeline Lilly), para derribar al trastornado exprotegido Darren Cross (Corey Stoll).
Finalmente se logró el estudio el “Hombre Hormiga” que se quería, dijo Kevin Feige, presidente of Marvel Studios.