Unos narcos colombianos intentaron meter 4,3 toneladas de cocaína a Costa Rica durante este fin de semana; no obstante, una información confidencial permitió a las autoridades decomisar este importante cargamento de droga.
Según la Policía de Control de Drogas (PCD), esas toneladas fueron encontradas este sábado 17 de julio dentro de un contenedor cuya carga lícita era cerámica. Este venía procedente de Turbo en Colombia con destino final Moín, específicamente el Muelle Gastón Kogan, en Limón.
Esta es la segunda incautación más importante en toda la historia nacional. La primera ocurrió en febrero del 2020 cuando, en las instalaciones de APM-Terminals, en Moín, Limón, se decomisaron 5,8 toneladas de droga que estaban previstas para viajar a Holanda junto a un embarque de plantas ornamentales.
Sobre el caso de este fin de semana, las autoridades explicaron que los agentes antidrogas estaban este sábado realizando las labores propias de sus cargos, por lo que analizaban y perfilaban varios contenedores que venían en el buque Cala Palma. Esto se hace de forma ordinaria para cerciorarse de que los narcos no ingresen estupefacientes.
Cuando los policías ejecutaban la revisión, recibieron una información por parte de la Dirección de Inteligencia y Seguridad Nacional (DIS), la cual indicaba que, presuntamente, ese buque estaba “contaminado”; es decir, que existía la posibilidad de que viniera droga allí.
Ante esa alerta, se enfocaron aún más en la inspección, lo cual les permitió dar con el contenedor que tenía en su interior, al menos, 173 bultos con droga. Dichos bultos estaban camuflados entre la carga lícita.
Ante esa situación inicial, los agentes continuaron con una detallada labor que finalizó este domingo y que les permitió determinar que se trataba de un cargamento de 4.329 paquetes con cocaína, siendo que cada uno de ellos pesaba aproximadamente un kilogramo.
Con este importante decomiso, la PCD ha incautado unas 10,7 toneladas de aparente cocaína, en siete contenedores; para el 2020, fueron 16,2 toneladas de aparente cocaína en 18 contenedores; y, durante el 2019, se trató de 5,9 toneladas de aparente cocaína en 10 contenedores.