Una vez más, regresamos a las andadas de nuestro análisis por el apacible Pueblo Mágico de Mocorito, donde sin duda, si hoy fueran las elecciones su gente quedaría partida en tres; por un lado, la otrora rebelde clase política que hoy los gobierna del PAS, por otro; las perennes y tradicionales tribus del PRI que amenazan con su regreso, y finalmente; quienes buscan a como de lugar meter a la “Cuarta Transformación” a la Atenas, las motivadas huestes de Morena.
De antemano, sabemos que para poder visualizar muestras más claras de los posibles resultados del 6 de junio aún falta, en virtud de que será hasta en febrero prácticamente donde todos los partidos estén revelando oficialmente a sus candidatos y candidatas en los 18 municipios del Estado.
Los cierto, es que estamos inmersos en tiempos de difusión de las respectivas convocatorias para esta denominación de poder, en el caso del PRI, ayer lo hizo en algunos municipios junto con la de diputados locales. Para el caso del PAS, según su dirigente Héctor Melesio Cuén Ojeda, será a finales de enero o principios de febrero, lo mismo que en Morena.
La historia electoral pasada reciente del serrano municipio del Évora, arroja que en el proceso electoral 2017-2018, la coalición integrada por el PAS, PAN, MC y PRD y su candidato Guillermo Galindo Castro, obtuvo: 9109 votos alzándose con el triunfo.
La candidatura común integrada por el PRI, PVEM y PANAL en la persona de Óscar Sinforoso Camacho Rodríguez logró: 8628 sufragios quedando en segundo lugar.
Y finalmente, la coalición registrada entre Morena, PT y PES “Juntos Haremos Historia” fue beneficiada con 4598 actas computadas para su ex candidato Claudio López Camacho.
A casi tres años de tan épica batalla en urnas, donde el triunfo se le acredita al PAS, logrando la reelección, déjenme decirles que los escenarios probables en la venidera, no han cambiado gran cosa, al menos de fondo, más no así de forma.
Los retos del PAS como gobierno, serán esta ocasión más diversos y complicados, quienes hasta hoy respaldan la aspiración hecha pública del empresario Jaime Enrique Ángulo López.
Definitivamente que Jaime Enrique es gente, trae con qué disputarla para llegar a la final con buenos números, pero aún así, no asegura el triunfo, en función de un desgaste natural de la administración de la que emana, aunado a la sustancial fractura ocasionada por la salida de José Noé Contreras Avendaño, quien literalmente partió al PAS en dos, “los memistas” que siguen cobrando en el gobierno y los que siguieron al “Güerito Contreras”.
Pronto sabremos quién le ofrece mas a éste último, su colmillo largo, amarillo y retorcido, ahora le indica esperar, si no, su última jugada maestra será apoyar a su cuate; Valerio Cervantes en Movimiento Ciudadano. Instituto que no prende ni a nivel Estado, o ya de muy jodido al PRI.
Los síndicos municipales no están con la administración de “Memo” Galindo, quedaron del otro lado y como rehén Angulo López. Para este proyecto, una vez más la parte sur (la de más votos) será el talón de Aquiles, el norte es por ahora su fortaleza.
En el PRI, les guste o no a las mayorías, preparan de nuevo el lanzamiento de Óscar Camacho, incluso advertimos que «está palomeado» por “el gober”, así que, aléguenles. Acarrearán consigo un partido muy dividido, un descomunal desgaste, pero aún así respira, sigue con vida en números sí no los divide más Óscar. Al tiempo.
Los morenistas, traen ambiente, se multiplican día a día y se han sumado al movimiento popular y de promoción de la 4T apellidos e integrantes de familias reconocidas como: Parra Melesio, López Cervantes, López Camacho, Avilés Ochoa, entre muchas otras.
Lo que hace de facto, que los respalde la marca del presidente de la República, la intención del voto según estudios y la percepción social, pero no sería suficiente si no se re-orienta el camino recorrido hasta ahora. Seguramente el factor que los reivindicará para consolidarse un solo frente –sin regateos– será Rubén Rocha Moya, quien por su peso y marcaje personal en la región; pudiera sacarlos adelante. ¡Aguzados pues!
A esto, sumémosle que las condiciones de Morena han ido al alza, el movimiento es más intenso y están mucho más presentes social y políticamente.
Así las cosas en el pujante y también turístico Mocorito, una vez más su clase política, pero sobre manera, su gente pudiera una vez más quedar dividida en tercios. De las posibles candidaturas comunes abundamos después.
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