Con la llegada del nuevo ciclo escolar, los estudiantes en diversos estados de México están listos para regresar a las aulas.
Sin embargo, este año se presenta con un giro inusual, pues muchos estados retoman las clases sin la introducción de nuevos libros de texto por parte de la Secretaría de Educación Pública (SEP).
Y es que, como seguramente saben, los libros de texto han sido una parte esencial del sistema educativo en México durante décadas.
Tradicionalmente, el inicio del ciclo escolar se acompaña de la distribución de nuevos materiales didácticos a los estudiantes de primaria y secundaria, los cuales no solo proporcionan el contenido curricular, sino que también representan una herramienta crucial para el aprendizaje y la enseñanza.
Sin embargo, este año, varios estados han optado por no implementar los nuevos libros de texto de la SEP, los cuales han creado mucha incertidumbre entre los padres de familia y gran controversia en redes sociales, pues la realización de sus contenidos no ha sido transparente y, por si eso no fuera suficiente, se han encontrado muchos errores en ellos.
Como era de esperarse, y a poco tiempo de iniciar el nuevo año escolar, esto ha generado debates y discusiones en torno al impacto de esta decisión en la educación de los estudiantes. A continuación, te recordamos qué está pasando con estos libros y qué estados han decidido no utilizarlos.
¿Qué está pasando con los libros de texto de la SEP?
En un movimiento sin precedentes en la historia de la educación en México, para el ciclo escolar 2023-2024 se hizo un cambio de planes de estudio por parte de la SEP y alteraron el contenido de los libros de texto gratuitos para que los niños solo aprendan lo que necesitan y lo que la comunidad requiere de ellos.
Estos libros, se ha confirmado, no cuentan con estructura pedagógica, fueron hechos con múltiples errores, no hubo pilotos con ellos (lo cual era obligatorio, de acuerdo a la ley) y ni siquiera fueron presentados para los docentes. De hecho, los maestros no fueron entrenados para enseñar con ellos.
Estos libros no contemplan español, geografía, ciencias, ni historia. Y, de los 10 a 16 textos que se entregaban cada año, este 2023 solo se dieron DOS: uno llamado ‘Nuestros Saberes’ y otro ‘Múltiples lenguajes’, los cuales reunirían la información de TODAS las materias, pero, por supuesto, con errores.
Por si eso no fuera suficiente, la información de los métodos que utilizaron para crear este plan no es público y, como era de esperarse, los padres no están contentos. Y pese a que se ordenó la suspensión definitiva de los textos para que se revisaran los programas educativos, estos libros fueron entregados. No obstante, hay estados de la república que se han negado a utilizarlos.
Es evidente que la educación en México está en un punto de inflexión en cuanto a los recursos didácticos.
La decisión de no introducir nuevos libros de texto plantea la necesidad de explorar enfoques alternativos y creativos para garantizar que los estudiantes sigan recibiendo una educación de calidad, la cual se llevará en estos estados que rechazaron los libros de texto de la SEP:
Jalisco
Guanajuato
Oaxaca
Edomex
Chihuahua
Colima
Aguascalientes
Querétaro
Los defensores de esta medida argumentan que el enfoque debe estar en la actualización de métodos pedagógicos y en la implementación de tecnologías educativas.
Algunos creen que esto podría impulsar la creatividad de los docentes al no depender de materiales preestablecidos, mientras que otros temen que la falta de libros afecte negativamente a los estudiantes.
A medida que estos estados inician el ciclo escolar sin nuevos libros de texto, surge la pregunta sobre el impacto a largo plazo en la educación de los estudiantes. Mientras algunos creen que esta medida podría fomentar la innovación y la adaptación pedagógica, otros se preocupan por la falta de un material unificado y actualizado en las aulas.
No obstante, también es el mejor momento para que los padres de familia y maestros se unan con el fin de ver por el futuro y la educación de todos los niños mexicanos.
Las reuniones ahora se volverán básicas, así como el desarrollo de nuevas estrategias para que, en conjunto, los pequeños puedan recibir el aprendizaje que merecen.
Con Información de CHIC