Holly Madison reveló en un libro que su estancia en la mansión Playboy fue un infierno de sexo y drogas que casi la llevan al suicidio, pero parece que detrás de la ex “conejita” también hay un oscuro pasado.
La ex novia de Hugh Hefner dijo que éste era un controlador que la trataba mal y además ofreció detalles de las conductas sexuales de él y otras chicas en la mansión.
En su libro “Down the Rabbit Hole. Curious Adventures and Cautionary Tales of a Former Playboy Bunny ” reveló que pensó en el suicidio porque ya no aguantaba más su vida como conejita de Playboy, pero ahora una ex compañera ofrece detalles poco conocidos de Holly.
Izabella St. James también vivió en la mansión y pudo tratar a Holly, por lo que dice que Madison sólo busca la fama y vengarse de Hugh Hefner por no casarse con ella, según indica el portal “Daily Mail”.
Según Izabella, Holly estaba obsesionada con Hefner y como sabía que a él le encantaba Marilyn Monroe, en alguna ocasión transformó su imagen para parecerse a la actriz, algo que desagradó a Hugh.
Además aseguró que todo el tiempo Holly trataba de vestirse de manera muy similar a Hefner e incluso tenía una bata idéntica a la de él.
En cuanto a las cuestiones sexuales, que tanto criticó Madison en su libro, Izabella comentó que era Holly la única que accedía a participar en prácticas extremas.
“Se retrata como una víctima… Holly eligió solo mentir completamente y omitir que estaba absoluta y completamente obsesionada con Hugh… tenía un calculado plan para entrar a la mansión y ser novia de Hef… Tenía una oscura obsesión con Hef. Trataba de parecerse a las ex novias que más le habían gustado”, detalló la otra ex conejita.
“Lo que era más extraño es que nos hacían celebrar con un ridículo pastel el aniversario del día en que ella se mudó a su cuarto y comenzó a tener sexo con él”, añadió.
“Holly se convirtió en su novia principal por que nadie más quería tener esa posición. Mientras las otras chicas regresaban a sus habitaciones, tú tienes que tener sexo con él todos los días o cuando quiera. También implicaba la actividad sexual en la que nadie más quería participar: sexo anal. A Hefner le gusta usar dildos y otros juguetes sexuales en Holly y que ella los usara en él también… la vimos hacer cosas sexuales extremamente humillantes y creo que parte de su amargura y venganza viene de eso”, detalló.
Izabella no entiende por qué si Holly se la pasaba tan mal en la mansión Playboy no abandonó antes el lugar, pues vivió ahí siete años.