El 70% de la poca agua dulce de que disponemos la consume el riego, el 20% se lo llevan los procesos industriales y tan sólo un 10% se aplica al consumo doméstico. Para regar se consume gran cantidad de agua y es poco lo que necesitamos a nivel doméstico.
El riego es sin duda una de las grandes asignaturas pendientes de la humanidad, el aumento constante de la demanda de alimentos debido al creciente incremento de la población, y el hecho de que la temperatura del planeta asciende progresivamente propiciando sequías, y por ende, la falta de producción de alimentos, hace que debamos empezar a actuar ya en consecuencia con los cambios que estamos experimentando. Investigadores de Aqua Maris plantearon el agua de mar como una posible solución a estos problemas.
Desde siempre el mar ha regado las zonas cercanas a la costa, adentrándose bajo tierra y manteniendo siempre húmedo el subsuelo, haciendo el mismo trabajo que los acuíferos de los ríos. Las plantas con una mayor capacidad para aprovechar el agua de mar se encuentran en las zonas más cercanas al mar, mientras que las otras se encuentran más al centro y en zonas más elevadas, aprovechando la continua humedad subterránea que le proporciona el agua de mar.
Los dos modelos que consideraron más eficientes para regar con agua de mar son los que muestra la naturaleza. Entonces crearon una capa freática con agua de mar para mantener el subsuelo siempre húmedo o adaptando las plantas a la salinidad del agua de mar (como puede ser la acelga), cultivándolas en un suelo que tenga la capacidad de drenar el exceso de sales. ¿Cúal sería el comportamiento del agua y los minerales bajo tierra?
El agua de mar no mata las plantas.
En el primer jardín creado en 2006 regado exclusivamente con agua de mar, durante 7 años siempre se mantuvo verde.Esto demuestra que realmente se puede usar el agua de mar para riego de cultivos o jardines. Lo importante es aprender a utilizarla y conocer el funcionamiento que tiene en distintos tipos de terreno.
Info. foodnewslatam