Sidney. El arquitecto Frank Gehry, premio Príncipe de Asturias 2014, estrenó en Sídney un edificio ondulante inspirado en la estructura de “una casa del árbol” que aspira a convertirse en el nuevo icono de la ciudad junto a la Casa de la Ópera.
El edificio, que costó 140 millones de dólares, ha sido bautizado como Dr. Chau Chak Wing, en honor a un empresario y filántropo chino-australiano, y es desde antier la sede de la Nueva Escuela de Negocios de la Universidad Tecnológica de Sídney (UTS).
Al inicio del proyecto Gehry definió el edificio como “un organismo de aprendizaje creciente con muchas ramas de pensamiento, algunas de ellas robustas y otras efímeras y delicadas”.
El nuevo edificio de la UTS, la primera obra de Gehry en Australia, tiene una fachada ondulante recubierta de láminas de vidrio donde se reflejan las construcciones aledañas, una sola columna recta y el ángulo más agudo de su diseño es de 72 grados.
El interior tiene el concepto de que todo pueda ser manipulado con el tiempo según su uso, en contra de la tendencia a concebir este tipo de construcciones como algo sólido y permanente.
Apoyándose en la idea del dinamismo, muchas de las salas donde se realizan las clases tienen una forma ovalada, lo que propicia un cambio de la relación entre el profesor y los alumnos, que se miran constantemente.
También hay grandes espacios de descanso y de encuentro en un interior dominado por una escalera flanqueada con material arrugado ascendente que reflejan las imágenes a manera de espejo.
Gehry explicó que ha buscado “humanizar el paisaje urbano” con su nueva creación, inspirada en los artistas del Renacimiento, así como en algo tan simple y fascinante como son los pliegues de la piel y de la ropa.