Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, exlíder del cártel de Sinaloa, obtuvo la suspensión definitiva en contra de la orden de extradición girada en su contra y por la que fue detenido el pasado 5 de enero en Culiacán.
Esto no quiere decir que “El Ratón” sea liberado del penal del Altiplano en donde se encuentra preso desde el día de su captura, sino que no puede ser entregado, por ahora, a gobiernos extranjeros por la presunta comisión de delitos en sus territorios.
Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, exlíder del cártel de Sinaloa, obtuvo la suspensión definitiva en contra de la orden de extradición girada en su contra y por la que fue detenido el pasado 5 de enero en Culiacán.
Esto no quiere decir que “El Ratón” sea liberado del penal del Altiplano en donde se encuentra preso desde el día de su captura, sino que no puede ser entregado, por ahora, a gobiernos extranjeros por la presunta comisión de delitos en sus territorios.
Sin embargo, aunque el juez otorgue una suspensión definitiva aún después de que se falle en el juicio de amparo, es la Secretaría de Relaciones Exteriores la que tiene la decisión de extraditar o no a Ovidio Guzmán, pues las determinaciones de los jueces para estos casos solamente son referentes a si se cumplen o no con los requisitos para realizarla.
Queda pendiente también que la Fiscalía General de la República (FGR) gire una orden de aprehensión contra “El Ratón”, pues aunque se sabe que esta dependencia ya integró una carpeta en su contra por delitos relacionados con la delincuencia organizada, aún no la cumplimenta.
De tal manera que si el gobierno de Estados Unidos no entrega la documentación requerida para formalizar la orden de extradición y se ordena dejarlo en libertad, la FGR podría reaprenderlo de inmediato por estos delitos.
Además de portación de armas de fuego de uso exclusivo del Ejército, con las cuales aparentemente fue detenido en flagrancia durante su captura en la comunidad de Jesús María, en Sinaloa.