Las dudas por cómo avanzó quedarán en segundo término y en la historia más bien el campeonato, el séptimo en 13 ediciones del torneo gracias a un contundente 3-1 sobre Jamaica.
Así habrá “Final soñada” entre Estados Unidos y el Tri el 9 octubre, posiblemente en Pasadena, para definir al representante de CONCACAF en la Confederaciones de Rusia 2017.
Un zurdazo de la mejor versión de Andrés Guardado abrió la llave, el “Tecatito” Corona aumentó la ventaja y Oribe Peralta cerró la pinza para abrir una válvula de escape que sobre todo alivia de presión al entrenador Miguel Herrera.
Jamaica fue un rival amenazante durante los primeros minutos. Desde ahí pudo ponerle el juego cuesta arriba al Tri, pero a la media hora se desinfló y en vez de buscar recortar distancias terminó buscando el contragolpe para no ser arrollado de peor manera.
El partido empezó a su gusto, con balones por arriba y México desorientado aunque salvándose en el último milímetro. Je-Vaughn Watson estuvo a nada de cabecear en el área chica, Guillermo Ochoa apenas le ganó un salto a Garath McCleary y la afición empezaba a cantar un angustioso “¡sí se puede!”.
Para no perder la costumbre, el “Piojo” Herrera debió innovar con Corona por el suspendido Carlos Vela y Jesús Dueñas en lugar de Héctor Herrera.
Pero Guardado no sólo es Capitán sino el más valioso del Tri en todo el torneo y con un zurdazo similar al de su gol en el Mundial contra Croacia abrió el marcador que dilapidó las aspiraciones caribeñas al minuto 30.
Terminó como el goleador del equipo con 6 tantos y marcó por cuarto partido consecutivo, ya no por penales dudosos sino para firmar lo que era la resurrección futbolística de la Selección, que había ganado pero nunca convencido como hasta esta noche.
Porque apenas bajó la pelota al césped y Jamaica se venció. Incluso ahora fue México el afectado por el arbitraje pues Rodolph Austin debió irse por doble amarilla al final del primer tiempo.
La roja no afectó pues al inicio del complemento apareció el “Tecatito” para poner el 2-0 de un zurdazo que él mismo construyó al robar un balón en la salida jamaicana. Al 60’ Peralta aprovechó un error garrafal en el área chica de Michael Hector y sólo el 3-1 de Darren Mattocks en contragolpe al 79’ volvió a ponerle emoción al encuentro.
El cuarto del Tri fue mucho más latente por remates de Miguel Layún y Paul Aguilar que apenas salvó el portero Ryan Thompson, así como por una contra del primero en conjunto con Oribe casi cuando el árbitro pitaba el final.
El Tri llegó cuestionado y beneficiado a este partido. Afortunado por ello, al menos respondió con un triunfo irreprochable para dejar que las dudas y cuestionamientos se quedaran literalmente en el camino.
Información: mediotiempo.com