Cd. Obregón, Son.- Armando Cisneros Espinoza, el especialista que, sin el consentimiento de los padres, extirpó por error un ojo sano al niño Fernando Jonathan, ya había sido denunciado en 2010 ante la Procuraduría General de la República por negligencia médica, según consta en el expediente 81/20013.
En aquella ocasión, recomendó aplicar “gotitas para los ojos” al menor Jhaziel Rodolfo sin percatarse de que el paciente tenía un padecimiento mayor, una retinoblastomía bileteral.
“Este doctor demostró toda su incapacidad médica, nos hizo venir hasta cuatro veces a la semana desde Hermosillo a Ciudad Obregón (a unos 270 kilómetros de distancia) para atender al niño y nunca detectó el tumor maligno”, recuerda Isela Guadalupe Díaz Lara, madre de Jhaziel.
A causa del mal diagnóstico, el menor, que hoy tiene seis años, tuvo complicaciones de salud y perdió el ojo izquierdo.
Indignada, la madre se asesoró y denunció penal y administrativamente al doctor Cisneros Espinoza.
También inició la queja 550/2010 ante el Consejo Consultivo del IMSS, cuyos integrantes liberaron de cualquier responsabilidad al oftalmólogo.
Su queja sólo sirvió para que su hijo recibiera mejor atención en la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) número 2.
“Vengo desde Hermosillo para que la sociedad se entere de la incapacidad de este doctor Cisneros y que hace años también perjudicó a mi hijo y ahora al niño Fernando Jonathan”, dice Díaz Lara.
El caso de Rodolfo Jhaziel se suma al de Fernando Jonathan, quien por error del doctor Cisneros el pasado viernes 26 se le extirpó un ojo sano, condenándolo de por vida a la ceguera.
Armando Cisneros Espinoza tiene la cédula profesional 3443957 expedida por el Sector Salud. Actualmente, se encuentra suspendido de toda actividad médica, luego de comprobarse que no sólo violó los protocolos, sino que se equivocó al extirpar un ojo sano a Jonathan Fernando, por lo que el Órgano de Control Interno del IMSS, la PGR y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos ya tomaron cartas en el asunto.