Nuestros augurios ahora más que nunca, cobran una mayor relevancia.
Es definitivo que con el advenimiento del proceso electoral a partir de la semana pasada, y una vez iniciadas las precampañas de manera formal a partir del 23 de diciembre: «los juegos del poder» habrían arrancado con la mira puesta en los comicios del domingo 6 de junio de 2021.
En ese sentido y bajo ninguna circunstancia, debemos perder de vista que en Sinaloa: el PRI es gobierno. A su vez, es quien encabeza de facto y encarnizadamente la alianza opositora anti-AMLO.
Empero, Morena: desde la figura del jefe supremo en la persona del ejecutivo federal, pasando por ambas Cámaras Legislativas —alta y baja incluida la local—, y solo exceptuando los consabidos gobiernos en los estados; posee y ejecuta el poder federal.
Para que quede más claro: el gobernador Quirino Ordaz Coppel, buscará lograr a como de lugar, ‘la joya de la corona’ para su ejercicio, jugando rudamente a ganar con la coalición opositora: PRI, PAN, PRD, es decir, con su elegido para sucederlo en el gobierno del estado y su posibilidad de un eventual triunfo el próximo año.
No obstante, es de nuestro interés aclarar en ese mismo sentido, que resulta una vil falacia, que en Sinaloa, está negociado en cuanto a su gubernatura, y que, el obsequio solicitado por el ejecutivo federal al gobernador, serían solo las 7 diputaciones federales y el Congreso local para desde el centro aterrizar la 4t.
¡No señores! De manera categórica y contundente les corroboramos que Morena en Sinaloa, y prácticamente en todo el país en afán de eliminar resistencias y estorbos para poder instaurar una reconstrucción total del sistema político y de gobierno, viene «con todo y por todo».
Particularmente en nuestro estado, el paquete incluye: en primerísima importancia; la obtención de la gubernatura, ambas diputaciones —locales y federales— y la mayor parte posible de presidencias municipales. Es pues, a saber, la instrucción precisa y firme, del líder máximo en México. ¿Ok?
Sencilla y llanamente es así, aunque analistas, politólogos y gurús en medios masivos en el tema en cuestión, venden el “mejor ángulo” en cuanto al futuro político de acuerdo a ciertos intereses. Asimismo, cuerto es que en la era actual, en tiempos de la híper-información vía internet y redes sociales todo pareciese complicárseles.
Cada vez queda menos duda, que para quienes eran los reyes de la polarización a través de medios masivos, y que a la postre, vendían su proyecto como la única idea viable, es indiscutible, que hoy, el escenario se les complica hasta para la creación y lanzamiento de un perfil que pudiera garantizar un eventual triunfo electoral.
Luego, a partir de la gran crisis política, pero sobre todo partidista que experimentamos; viene la creación de alianzas electorales, las cuales, en ningún sentido son malas, siempre y cuando representan los deseos de la sociedad, o por lo menos de una amplia mayoría.
En Sinaloa, por ahora, se dibuja un escenario de 6, y hasta nueve posibles candidatos a la gubernatura, donde destaca él o la aspirante que represente a la coalición PRI, PAN, PRD; otro, el de Morena; además el PAS, MC, PT, RSP, PES y Fuerza Social por México.
De los tragos amargos, enconos, rabietas y hasta desbabadas que están por venir al haberse conformado la alianza opositora sin la figura del candidato, abundaremos después que dará mucho de qué hablar.
Muy vivos, que la barrida viene de: “arriba hacia abajo” no lo olviden, y varios que reprenderán a las minorías, se niegan a ver su realidad.
Al tiempo.
Debatimos en: @carlosrochin40
Contacto: [email protected]